La carga del transformador se refiere a la potencia que pasa a través de un transformador, incluida la potencia real (kW) y reactiva (kVAR). Mantener la carga dentro del 40-80% de su capacidad nominal garantiza una eficiencia, regulación de voltaje y longevidad óptimas. La sobrecarga puede causar sobrecalentamiento, fallas de aislamiento y reducción de la vida útil, mientras que la sobrecarga insuficiente conduce a ineficiencias. El monitoreo regular, el equilibrio de carga y el mantenimiento de un buen factor de potencia son esenciales para garantizar un funcionamiento seguro y eficiente del transformador.