1. Prueba de vacío
Propósito: Asegurar que el tanque del transformador pueda soportar el vacío sin deformarse en exceso, asegurando la integridad estructural.
Procedimiento: El tanque del transformador (sin aceite) está sometido a un vacío de 760 mm de mercurio.
Una vez liberado el vacío, se mide la deflexión permanente de las placas planas.
La deflexión no debe exceder los valores especificados en la tabla, que dependen de la longitud horizontal de la placa (por ejemplo, 5 mm para placas de menos de 760 mm de longitud).
Importancia:
Garantiza que el tanque pueda mantener las condiciones de vacío durante la fabricación o el funcionamiento sin daños estructurales.
2. Prueba de presión
Propósito: Verificar que el tanque del transformador pueda soportar la presión interna durante la operación sin deformación permanente.
Procedimiento: El tanque del transformador (con todos sus componentes como radiadores y conservadores) está sujeto a una presión igual al doble de la presión normal del aceite o 0,36 kg/cm², lo que sea menor.
Después de liberar la presión, se mide la deflexión permanente de las placas planas.
Los valores de deflexión no deben exceder los especificados en las condiciones de prueba de vacío.
Importancia: Garantiza que el tanque pueda manejar las fluctuaciones de presión interna de manera segura durante el funcionamiento.